Las luces navideñas, la decoración, los escaparates…todo nos recuerda que nos metemos de lleno en épocas festivas y, como es normal en este país, todo se celebra en torno a la mesa. Por eso, hoy quiero dedicar un capítulo especial a las sillas de comedor.
Recuerdo, cuando era pequeña, ir a celebrar las Navidades a casa de mi tía. Allí nos reuníamos toda la familia. Y una de las cosas que siempre se necesitan eran sillas. Por suerte vivíamos cerca y podíamos llevar sillas de mi casa, porque si no, no había suficientes. A mí me parecía un rollo y siempre intentaba escaquearme de cargar con las dichosas sillas.
Por eso, ahora que la Navidad se celebra en mi casa, una de las primeras cosas que hice fue revisar que había sillas suficientes para todos mis invitados. A la hora de decorar el comedor opté por una mesa extensible para no tener nunca problema de espacios, o de tener que unir varias mesas, que no me gusta nada.
Así que, lo siguiente que hice fue hacerme con sillas de comedor cómodas y prácticas. Elegí un juego de sillas de comedor de diseño tapizadas en ecopiel. Preciosas. Me encanta como contrastaban con la mesa. Pero de cara a fiestas y celebraciones compré también un juego de sillas de comedor apilables. Ese es el verdadero éxito de estas sillas. Mientras no las necesito las guardo en el trastero, pero para estas fechas, las saco y las dejó preparadas en su formato apiladas. Así no ocupan espacio y no estorban nada, pero cuando las necesito las tengo a mano.
Con las sillas de comedor apilables, mis invitados están mucho más cómodos que si utilizase taburetes o sillas plegadas, que es otra opción que se utiliza mucho. Pero no está elegante. Y como me encanta la decoración no quiero dejar libre ni el más mínimo detalle.
Hace tiempo que compré mis sillas de comedor apilables, pero si queréis alguna idea os recomiendo las sillas Noa 725 de Pedrali. Esta marca se caracteriza por lo cuidad de su diseño sin olvidar la funcionalidad. Es la mejor opción para conjugar decoración y uso práctico.
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